A medio camino entre el abrazo
y el reproche, en la frontera
del porqué y el quizá,
donde se hospedan las preguntas,
los silencios,
las esperas,
donde residen los poemas,
los intentos,
los tequieros.
¿Sabes dónde te digo?
Pues allí también miré,
y allí tampoco estabas.
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¡me encanta!
ResponderEliminarÉste texto, concretamente éste.
ResponderEliminarMe enamora.
Me pone los pelos de punta. Es increíble.
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